domingo, 28 de noviembre de 2010

Domingo.

A mí me gustan los lunes. Lo único que no me gusta es el momento en el que me tengo que acostar los domingos por la noche: Después de todo el fin de semana, del descanso, de los ratos de tiempo libre... No me gusta acostarme los domingos y tener que levantarme los lunes. Por lo demás, todo como siempre... Además, noviembre, ya ha pasado. =)

miércoles, 24 de noviembre de 2010

emecuatroerreunoa

Afortunadamente siempre habrá quien esté cerquita de mí para encontrar las cosas cuando a mí no me "apetezca" hacerlo.

Ya he dicho alguna vez que quiera o no siempre acabo encontrando todo (o casi todo) lo que pierdo.

Perder.

Me odio. Tendrán que pasar unos cuantos días para que deje de hacerlo.

Esta mañana he perdido (porque ya doy por hecho que no volveré a verlo) el mejor regalo que me habían hecho nunca: un cuaderno. Creo que de momento no hay cosa que más coraje me dé; y como ya he dicho tendrán que pasar días para que deje de hacerlo.

Y lo peor es que me duele más por ellos que por mí. Por lo que suponía. Porque a simple vista podrían ser unas cuantas hojas sin sentido donde yo escribía (perdón) mis gilipolleces. Pero era mucho más que eso... eran ellos, eran sus dedicatorias, era el cariño que pusieron en escogerlo, eran mis 19 y todo lo que ha ocurrido desde mi último cumpleaños, era yo.

Lo dicho, que me odio. Mucho.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Buscar.

Se busca urgentemente alguien que se empeñe en recordarme que merece la pena el esfuerzo; que me empuje si cree que me estoy rindiendo. Le estará permitido abofetearme siempre que considere que lo necesito para apretar los dientes con rabia y continuar. Se necesita alguien que me grite cuando no haga las cosas con decisión y confiando en mí mismo, y eso implica que sus gritos también sean de ánimo. Es necesario que se le salten las lágrimas cuando vaya viendo que voy consiguiendo mis propias metas poco a poco; que además esté para darme dos palmadas en la espalda si no lo consigo y tengo que volver a empezar... Alguien que se entregue sin condiciones porque ni soy fácil, ni nadie dijo que esto lo fuese a ser. Se busca a alguien que se arriesgue a intentar entenderme y eso supone ser mucho más terco que yo.

Son tantas las cosas que puedo seguir pidiendo, que creo que aquí mismo paro de escribir.


lunes, 8 de noviembre de 2010

Noviembre.

Estamos a lunes 8 y llevo desde el día 2 deseando que se acabe el mes. Eso, o que mis días pasen a tener 25 horas (algunos) y otros 50 (la mayoría). Pero ya es otoño, y eso en parte me agrada. Me gustan los días de primavera, cuando sale el sol después de un largo invierno; pero también me gustan los días como hoy, fríos, medio lluviosos y de los que te incitan a sacar una bufanda del armario y a desear un plato de sopa caliente a la hora de comer.

Y ahora a otra cosa.

Para quien aún no lo sepa, estudio Historia (o lo intento =S ). Hoy he pasado toda la tarde leyendo en la biblioteca un libraco enorme del que tengo examen dentro de un par de semanas. Y toda la tarde es desde las 15'30 hasta el cierre de la biblioteca, 21:00... Pero lo que yo quería contar, era que sin duda alguna lo que más recordaré de la tarde de hoy no son todas las teorías acerca del origen del Neolítico... no...
Hoy he aprendido qué es el Principio de exclusión de Pauli, (espero que esté bien escrito) gracias a una de las personas de las que más voy a aprender desde que lo conocí. El ejemplo que mi amigo me ha puesto para explicármelo tenía que ver con la forma en la que se iba sentando la gente al llegar a la biblioteca y era curioso porque en realidad coincidía.

Lo siento si esperabais otra cosa... pero hoy, esta ha sido toda la "acción" que ha tenido mi día. Prometo volver a actualizar más a menudo.

Noviembre... no me das miedo.

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Como ya he dicho en el otro blog, prometo empezar a contestar todos los comentarios en la misma entrada... cosa que hasta el momento no he hecho! =)

sábado, 30 de octubre de 2010

Improvisado.

Me gustan los días como hoy. Siempre me gustó ver de llover y en ocasiones hasta mojarme. Sin embargo, hoy es diferente. Es uno de esos días en los que la gente sale muy temprano de casa a hacer recados a pesar de que el tiempo no acompaña. Yo, en cambio, me encuentro en uno de los rincones de mi casa que más me gustan: En la tienda de zapatillas de mi madre.

Y la gente, va y viene. De vez en cuando parece que se calma el aire o sin previo aviso se pone a llover. Vendo un par de zapatillas o unas botas y todo vuelve a empezar: el vaivén de personas, la calma, el agua, las zapatillas... y alguna que otra cosa de las que acaban con la rutina como alguna llamada de teléfono o la visita inesperada de un viejo amigo. Creo que ya no recordaba estos sábados por la mañana.

domingo, 10 de octubre de 2010

Felicidad.

“Felicidad, qué bonito nombre tienes.” Felicidad. –La cabra mecánica.

Llevo unos días pensando qué escribir y una sola idea me rondaba la cabeza. Es esta. Sin embargo, cada vez que quiero expresarme llego a la conclusión de que ni todas las palabras que pueda usar lograrían que os hicieseis una idea aproximada de cómo me siento.

Últimamente me levanto cantando siempre. Sea la hora que sea. A veces mi hábito me convierte en insoportable las siguientes 24 horas del día, aunque eso sólo ocurre escasas veces y cuando me da por cantar la misma estrofa cada dos minutos.

He dejado de pensar que quizá detrás de esta época de “felicidad improvisada” viene una mala racha. En estos momentos mi vida sólo tienes momentos buenos y muy buenos. Siempre los ha tenido, pero es ahora cuando he aprendido cómo distinguirlos.

Me siento bien donde quiera que esté. Será que estoy recuperando algo que me faltaba desde hace tiempo o que me conformo con lo que tengo.

No sé qué más escribir, ya he dicho que no consigo expresarme bien cuando intento explicar que estoy pletórico y que me alegra ver el reflejo de mi cara en el espejo. Ese yo es el de verdad.

Hago lo que me apetece en cada momento sin descuidar mis obligaciones, y me da lo mismo lo que pueda pensar el resto del mundo. A quien no le guste que se fastidie, porque Sergio… sonríe.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Inciso: ¡¡Aviso a navegantes!!

En vista de que estos últimos días han aumentado las visitas a este blog y los seguidores, he de informar que tengo otro blog que cree antes que este y en el que suelo escribir también con cierta frecuencia:

http://desaventuranzas.blogspot.com/

Un saludo a todos los que os dais por aquí una vuelta para leerme o comentar.

martes, 7 de septiembre de 2010

Sonrisas en Cero Coma.... Los ojos con que uno se ve.

Tenía el don de buscar la felicidad hasta en los ojos lacrimosos de la gente.
Siempre valoré (quizá en exceso) tu filosofía de vida, diciendo muchas cosas con muy poquitas palabras.

Una.
"Sonríe."

Ya he dicho que quizá en exceso:
-Sonrío cuando no me apetece.
-Sonrío cuando me encuentro cansado.
-Sonrío cuando le doy a todo quinientas vueltas. (Aquí más bien, sonrío y vuelvo a seguir contando vueltas)
-Sonrío cuando....
-Sonrío cuando...
-Sonrío...

Si me encuentro solo o no consigo ponerme en pie; si llevo dos meses preparándome los exámenes de esta semana y antes de hacerlos me entero de que si no paso limpio tendré que cargar con más asignaturas de las que debería; (Espero no tener que sonreír si suspendo) Sonrío cuando... Sonrío cuando... Sonrío...

Nunca he dejado de sonreír. Desde hace un año y un par de semanas, lo hago con más razón. Podrás tener cientos de virtudes, sin embargo, la sonrisa es primera que recuerdo cada vez que pienso en tí. "Por salir de todos tus problemas con una sonrisa."

¿Y a estas alturas me vienes con que te ves fea? No querida, eso solo depende de los ojos con que uno mire a una persona...

De los ojos con que uno... mire a una persona.

Así que deberías empezar por mirarte de otra forma; en un espejo por ejemplo, para que de una vez comprendas que estás equivocada.
No obstante si después de eso sigues creyendo que soy yo el que está equivocado, no volveré a rechistarte que te sientas fea. En ese caso ( y sólo en ese caso) te dejo que (aunque suene muy macabro) me saques los ojos y puedas quedarte con ellos...

" Que la belleza sólo depende de los ojos con que cada uno te ve... "

Le comenté:
-Me entusiasman tus ojos.
Y ella dijo:
-¿Te gustan solos o con rimel?
-Grandes, respondí sin dudar
Y también sin dudar
me los dejó en un plato y se fue a tientas.
Ángel González.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Reflexionar.

"Me da vértigo el punto muerto
y la marcha atrás,
vivir en los atascos,
los frenos automáticos y el olor a gasoil.

Me angustia el cruce de miradas
la doble dirección de las palabras
y el obsceno guiñar de los semáforos.

Me da pena la vida, los cambios de sentido,
las señales de stop y los pasos perdidos.

Me agobian las medianas, las frases que están hechas,
los que nunca saludan y los malos profetas.


Me fatigan los dioses bajados del Olimpo
a conquistar la Tierra
y los necios de espíritu.

Me entristecen quienes me venden clines
en los pasos de cebra,
los que enferman de cáncer
y los que sólo son simples marionetas.

Me aplasta la hermosura de los cuerpos perfectos,
las sirenas que ululan en las noches de fiesta,
los códigos de barras,
el baile de etiquetas.

Me arruinan las prisas y las faltas de estilo,
el paso obligatorio, las tardes de domingo
y hasta la línea recta.

Me enervan los que no tienen dudas
y aquellos que se aferran a sus ideales sobre los de cualquiera.

Me cansa tanto tráfico y tanto sinsentido,
parado frente al mar mientras que el mundo gira."

Francisco M. Ortega Palomares

lunes, 23 de agosto de 2010

Sinceridad.

Al final, va a resultar que es cierto que "si quieres bailamos, me pongo los zapatos y me llevas..."

domingo, 22 de agosto de 2010

Bailar.

Un tango se baila entre dos; simplemente era la forma de decir que algo no pasa entre dos si uno no quiere.
Y "si quieres bailamos, me pongo los zapatos y me llevas..."

viernes, 16 de julio de 2010

Abulia.

"Uno tiene la angustia, la desesperación de no saber qué hacer con la vida, de no tener un plan, de encontrarse perdido, sin brújula, sin luz adonde dirigirse."
Pío Baroja; El árbol de la ciencia

Angustia es la palabra más exacta para ajustarse a lo que tengo ahora mismo encima. Todo me agobia. Qué hacer, que decir, cómo actuar... Todo sin guión porque sino esta historia que es mi vida empezaría a perder la gracia.

He descubierto que, en contra de todo lo que pensaba, soy algo rencoroso; mirándolo por el lado bueno no está de más aprender algo de mí mismo. No sé con certeza el tiempo exacto que tardará en esfumarse esta sensación. Ni siquiera sé si se irá.
Aun así seguiré cada día intentando encontrar el camino correcto; sin brújula para poder perder el norte; sin luz, para sentirme solo y apagado a veces.

Trato de luchar contra esa sensación que me pone contra las cuerdas y no me deja... "perdonar". Es superior a mí. Hasta que llegue la cura milagrosa que necesito y no encuentro, lamentablemente, seguiré soltando frases de las que duelen, poniendo malas caras, volviendo la espalda... y me jode más que a nadie.

[...] cuando menos lo merezca porque es cuando más lo necesito.

Necesidad.

Porque sí, porque ahora mismo me apetece dejar escrita cualquier cosa que se me pase por la cabeza aunque sepa que serán muy poquitos los que pasarán por aquí; que algunos de ellos sonreirán, otros me pedirán prestadas un par de frases y el resto (prácticamente ninguno) dejará un comentario... Pero yo sé que de vez en cuando pasáis, me leéis y os vais... Se agradece la visita.

domingo, 16 de mayo de 2010

Recuperar

Ya dijo Manolo García que "nunca el tiempo es perdido" que "da igual si no hay motores, tenemos velas" y que "guardo una tarde de Sol... una tarde de Sol por si hace falta".

Orgullo ( -so de mi mismo) =S

"La razón frente a las pasiones"

viernes, 14 de mayo de 2010

Curvas

y, aunqe la línea recta es la distancia más corta entre dos puntos... siempre me gustó darle 500 vueltas a todo: complicarme la vida, volver hacia atrás, repasar las cosas, y más qe rectas... curvas. Muchas curvas. Después de todo es más gratificante conseguir aquello qe más cuesta.... aunqe el camino sea más complicado y lleve al mismo lugar.

jueves, 13 de mayo de 2010

Lugar

Una vez me equivoqué de camino y llegué hasta el sitio en el que se juntaron, un día, tu vida y la mía.
Allí comprobé que todas las cosas que en otro tiempo me habías dicho, no existían y en el caso de existir, apenas tuvieron valor. ¿Por qué? Pues porque el día que aquel camino dejó de juntarse (esta vez por decisión mía) prometiste cientos de cosas...
Cientos de cosas que se perdieron en medio de la noche con un par de tragos de vodka y la decisión de que(por despecho u orgullo)yo era ya un peregrino de otro camino.

miércoles, 12 de mayo de 2010

martes, 11 de mayo de 2010

Fugaz

Fugaz...

La fugacidad de las palabras lleva a que a veces cambien de destinatario, de dirección, de forma de ser y parecer. Algunas cosas se dicen mientras se piensan otras muy distintas.